miércoles, 2 de enero de 2013

A.

Hablo (porque aunque no oiga su voz, me la sé de memoria) con la grandiosa A. vía correo electrónico sobre varios aspectos sinsentido (pero interesantísimos, como por ejemplo del tiempo tropical de Bilbao) y de repente llegamos a un tema de vital importancia (nos pasa pocas veces). Estamos de acuerdo en que, vale que el mundo en general no va del todo bien (entiéndase el eufemismo), PERO, que ya está bien de lamentaciones, de negatividad, de que todo sea oscuro, de ese pesimismo tan agobiante y tan terriblemente palpable. Que estamos hartas de oír lo maravilloso del pasado, de lo jóvenes y lozanos que éramos, de lo genial de nuestro ex-trabajo y de nuestra ex-vida, con nuestro ex-sueldo en nuestro ex-palacete (porque somos señoras de bien) en compañía de nuestro ex-perro. Tanto A (diosa donde las haya) como yo, hemos tenido que sacrificar MUCHAS cosas durante nuestra vida en busca de un futuro mejor y de ahí nuestro lema (del que también hablamos via mail), y que hemos decidido compartir contigo porque somos así de majas. Dice así:

Querida amiga;  entendemos que te disguste tu vida, que estés aburrida, muy asqueada, que los gases de tu pareja ya no te hagan gracia (es un decir), que tu trabajo (si es que tienes) no te satisfaga, que se te haya estropeado el coche (o que carezcas de uno) y que el transporte público te produzca alergia (a nosotras también), que estés frustrada porque te has puesto como una auténtica cerda durante las navidades (nosotras igual), que te dé asco tu casa, que odies el frío... chica, que lo entendemos todo y mucho de ello, también lo compartimos, PERO y aquí radica la auténtica diferencia (entre tú, querida amiga, y nosotras), hemos decidido dejar de quejarnos y entregarnos a un plan de acción, que como somos tan inmensamente generosas, también pasamos a compartir:

Si no te gusta tu vida, la cambias, cielo. Sí, bien sabemos que es difícil (que no imposible) y que es mil veces más sencillo lamentarse, PERO hija mía, ya has visto que eso no te lleva a nada. Si no hay trabajo en tu país, emigra, que nos da a nosotras que la Vírgen del Rocío no te va a salvar de la lista del paro, por mucho que se empeñe la ministra Báñez. Si no te gusta tu pareja, pues la dejas, o la cambias, o te vas a vivir a una comuna y practicas el amor grupal (del que somos fans, que no seguidoras), y si te molesta tu aspecto porque engulles cien mil calorías por día (o por hora), pues cierras el buche o te pones a correr un rato, bonita (gracias Loca de Mierda por esta frase genial). 

Y, si a pesar de todo, quieres seguir igual (estás en tu derecho amiga, faltaría más), haznos el favor de quejarte en silencio, como cuando tienes hemorroides... que ya está bien, no crees?

Acabamos esta entrada, redactada a cuatro manos, con una frase copiada de un blog genial (http://espacesinstants.blogspot.com.es/) y escrita por Almudena Grandes para El País:

 "Sean fuertes, por favor, y sean felices.
Porque la felicidad es la mejor manera de resistir."

Un beso,

Arrate y Dani
 

3 comentarios:

  1. Bravo a los dos, la alegría, la sonrisa son la mejor arma...
    Besos.

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  2. Brava tú!!!! Mil besos de los dos!

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  3. jajajajajajajaj brutal! me encanta lo de cierra el buche o te pones a correr un rato jajajajaja buenísimo
    no pares sigue sigue

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